Sábado 14 de Junio de 2025
Es de vital importancia aumentar el consumo de líquidos sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada y no exponerse al sol en exceso, ni en horas centrales del día (entre las 11 y las 17 horas).
Asimismo, se debe evitar las bebidas alcohólicas o muy azucaradas y las comidas muy abundantes, por el contrario es recomendable consumir verduras y frutas y reducir la actividad física, además de usar ropa ligera, holgada y de colores claros; sombrero y anteojos oscuros.
Cabe destacar que para prevenir el golpe de calor es importante permanecer en espacios ventilados o acondicionados y, ante dolor de cabeza, vértigos, náuseas, confusión, convulsiones y pérdida de conciencia; piel enrojecida, caliente y seca, respiración y pulso débil, y elevada temperatura corporal (entre 41 y 42 grados centígrados), se deberá trasladar a la persona afectada a la sombra, mantener la cabeza erguida y refrescar, mojándole la ropa, aplicarle hielo en la cabeza, darle de beber agua fresca o un poco salada, y solicitar de inmediato, ayuda médica.
El golpe de calor es un trastorno ocasionado por el aumento de la temperatura del cuerpo como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas y humedad o el esfuerzo físico intenso (ejercicios) en altas temperaturas; y en estas situaciones el cuerpo tiene dificultades para regular su temperatura.
Por tal motivo, se produce un agotamiento del mecanismo natural del sudor y hay desajuste del centro cerebral que controla la temperatura corporal. Si esto sucede se produce el agotamiento por calor y de persistir las circunstancias el golpe de calor.
El golpe de calor es una forma grave de lesión por calor y la temperatura del cuerpo alcanza los 40 grados o más.
