Caída de ventas, despidos, cesantías, describen el momento actual que atraviesa el país y Chascomús
Al igual que en otras ciudades, comercios de distintos rubros y empresas locales enfrentan un contexto de baja del consumo y de apertura de mercado. Esto repercute en el mercado laboral, poniendo en riesgo la estabilidad de vecinos y vecinas en el futuro inmediato.
Mientras el gobierno nacional celebra logros como la baja de inflación y el equilibrio fiscal, se desploman los indicadores de consumo y de empleo. Pese a las afirmaciones sobre el éxito del plan económico, los datos duros sobre la economía encienden alarmas por todos los frentes. En un contexto de salarios y jubilaciones congelados con servicios caros, con una de las canastas básicas alimentarias más caras en dólares del mundo y con falta de dólares en el mercado local, el consumo se desploma y crece la tasa de desempleo.
Esto se agrava cuando se observa el saldo de la balanza comercial, donde la importación del rubro productos terminados es el que muestra un mayor crecimiento. Esas importaciones se pagan con dólares que se van del país, al igual que los que gastan los argentinos que pasean por el mundo, especialmente Brasil y Miami.
En contraste, otro dato relevante tiene que ver con los dos fines de semana largos de junio. Según informan desde el área de Turismo de la Municipalidad de Chascomús, la ocupación hotelera disminuyó un 11.1% durante el fin de semana del 17 con respecto al mismo feriado del año anterior; en tanto que en el fin de semana del 20, se registró 19.8% también en relación al año anterior.
Es que el turismo interno registró una caída importante. Según los datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), sólo durante los dos fines de semana largos de junio, se registra una caída del 16.6%, y del 27.9% en el consumo, comparado al mismo período del año anterior. El mayor ajuste se observa en la reducción de las estadías, además de los servicios recreativos y consumo comercial. Menos turismo y más austero.
Sin embargo, sostiene la misma CAME, si bien en la comparación interanual se observa esta caída, la cantidad de gente que se movió muestra una fuerte adhesión al turismo interno, consolidándolos como una herramienta clave para sostener el movimiento turístico en temporada baja.
La apertura económica, conjugada con la caída del consumo, tiene consecuencias sobre la producción local. Según CAME, en mayo se registró una caída del 0,7% con respecto a abril y del 2,9% interanual en el consumo minorista PyMe. Los rubros que registran mayor retracción son Alimentos y bebidas (-7,6%), Ferretería, materiales eléctricos y de la construcción (-2,6%), Textil e indumentaria (-1,6%), Calzado y marroquinería (-0,5%).
Además, la situación de las PyMes impacta directamente en otro indicador que también da cuenta de la caída en la producción: la tasa de desempleo. El último informe del INDEC registra un aumento de la desocupación del 7.9% en el primer trimestre de 2025 con respecto al 2024. Un dato curioso es que 16.1% de personas ocupadas demanda empleo, es decir, ya tiene un trabajo pero busca otro.
Es un modelo que profundiza las brechas entre ricos y pobres, apuesta a la sustitución de la producción por importaciones y a la renta financiera. Con un Estado ausente, sin obra pública, la falta de trabajo o la precarización laboral en crecimiento, el panorama no es para nada alentador en Chascomús ni en ningún lugar de nuestro querido país.
Es muy importante mantener libre de residuo las bocas de tormentas y las zanjas